El beisbol venezolano sobrevive a la debacle económica en Venezuela

  • hace 6 años
La Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) cumple su torneo número 74 de manera consecutiva en condiciones extremas. Una hiperinflación galopante, con un índice de 10 millones por ciento de proyección para el año 2019, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), los ocho equipos que conforman el campeonato sortea las dificultades para que el principal pasatiempo del venezolano siga en pie.
Los equipos Bravos de Margarita y Águilas del Zulia tienen serios problemas para utilizar sus estadios, puesto que ambos presentan fallas graves en el servicio de electricidad. Los de Margarita han planteado a la Liga disputar sus encuentros como local a partir de las 2 de la tarde, lo que sería exponer a los peloteros a jugar bajo el calor de la denominada Perla del Caribe. Por su parte, los zulianos no jugarán en casa, por lo menos, hasta el mes de noviembre debido a los trabajos de recuperación en las torres de luz. Otros clubes han decidido jugar más temprano debido a la inseguridad, aunado a las alarmantes fallas en el transporte público, que impide a los ciudadanos desplazarse con facilidad durante cualquier horario.
El presidente de los Leones del Caracas, Luis Ávila calificó la situación como “bastante complicada”. Precisó las dificultades que requiere la planificación dentro de un equipo deportivo con unos costos que se elevan con el pasar de las horas. “Muchos hechos como el transporte, hospedaje y salarios que son difíciles de predecir”, refirió el mandamás del conjunto capitalino.
Para Oswaldo Guillén, mánager de los Tiburones de La Guaira y único estratega latino en conquistar un título en las Grandes Ligas, reconoció que a pesar de su estatus no está ajeno a la crisis. “Tengo 15 días sin agua”, dijo, al tiempo que recordó que no cargaba tobos de agua desde que vivía en una zona popular antes de conseguir sus éxitos dentro de la pelota como jugador y dirigente. Sin embargo, Guillén no utiliza la debacle económica como excusa, y asegura que los fanáticos deben estar felices por contar con un espectáculo como el beisbol a pesar de todo.
Otro aspecto que genera contradicciones, es la aprobación por parte del gobierno venezolano de 12 millones de dólares para la LVBP, cuando hay sectores como el de la salud con crisis que alcanza la emergencia humanitaria. Ante esa situación, el presidente del Caracas Luis Ávila respondió que es un patrocinio que apenas alcanza para cubrir la operatividad de los equipos, asegurando que de ese dinero “no sobra nada”.

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